Proyecto Hombre detecta un incremento de un 29 % en las primeras atenciones realizadas a menores y jóvenes.
La entidad ha detectado mayores consumos, problemas conductuales y uso abusivo de TIC y de apuestas. Aumenta el número de jóvenes con consumos de cannabinoides sintéticos (un 25 % lo consumen)

Valencia, 27 de junio de 2019

Durante el año 2018, la Fundación Arzobispo Miguel Roca-Proyecto Hombre de Valencia ha alcanzado la cifra de 1.392 personas que demandan atención y/o asesoramiento , habiendo iniciado tratamiento un total de 859 personas y 574 familias en sus Centros de Día de València, Gandia y Ontinyent, en el Área de Prevención, las Comunidades Terapéuticas de València y la Comunidad Terapéutica Intrapenitenciaria (CTI) situada en el Módulo I del Establecimiento Penitenciario “Antonio Asunción” de Picassent. Además, los responsables de Proyecto Hombre han destacado que la demanda de asesoramiento de familias, sobre todo de jóvenes y adolescentes, se ha incrementado en un 29%.

Las cifras se mantienen como en ejercicios anteriores respecto a las sustancias de mayor consumo, que siguen siendo la cocaína 44 %, el alcohol, 19%, cocaína y alcohol un 14% y el cannabis 10%. El consumo de alcohol suele estar presente en la mayoría de las adicciones derivadas de sustancias estimulantes, aunque no se perciba como problemático.

Según los datos extraídos de la Memoria 2018 de Proyecto Hombre Valencia, que se han presentado esta mañana en rueda de prensa, se mantiene el perfil mayoritario de las personas atendidas: en cuanto a adultos, hombre de origen español (84%), con una edad media de 39 años, consumidor de cocaína, soltero y en paro; en cuanto a jóvenes, hombre de origen español (80%), con una media de edad de 17 años, soltero y estudiando. En lo referente al género, las mujeres continúan teniendo mayores dificultades para acceder a tratamiento. Siendo solo un 16% del total de personas atendidas. Es este sentido, los responsables de la entidad consideran necesario continuar profundizando en la investigación de las causas que obstaculizan el ingreso de las mujeres a tratamiento y su adherencia al mismo.

El director de Proyecto Hombre, Vicent Andrés, ha afirmado que se continúa afianzando el Programa de Prevención Selectiva e Indicada que ofrece alternativas de asistencia dirigidas exclusivamente a jóvenes/adolescentes. Los datos aportan un incremento del 29% de atenciones a familias con menores y jóvenes a cargo, respecto al ejercicio del año anterior. Hay que mencionar que la percepción de riesgo de consumo de cannabis es muy baja, refiriéndose en muchas ocasiones como un consumo no problemático.

También en la población adolescente/jóvenes, desde Proyecto Hombre, se aprecia un aumento considerable y preocupante en el número de personas asistidas a causa de adicciones comportamentales (TIC: móvil, internet, redes sociales, juegos en línea, videojuegos…). La Entidad está tratando ya un número importante de personas con problemas con las apuestas deportivas y sobre todo con consumos abusivos de cannabis sintético (un 25% de las personas atendidas en el programa). Un 70% de los jóvenes en tratamiento, todos hombres, utilizan los juegos on-line de forma abusiva como forma de ocio, aunque no es la principal demanda por la que acuden a tratamiento.

Dentro del trabajo de inserción social con presos en el programa de Proyecto Hombre destaca que 58 personas, por encontrarse en tratamiento, se han beneficiado de medidas penales o penitenciarias. A 27 de ellos, se les ha facilitado, una vez clasificados en tercer grado, el cumplimiento del resto de la condena en centro extra penitenciario de tratamiento de deshabituación. Por otro lado, otras 31 personas se han visto beneficiadas de medidas alternativas penales y/o administrativas tales como suspensión de condena, medidas de seguridad, sanciones administrativas, entre otras.

El director de la Fundación, Vicent Andrés ha destacado, entre otras, algunas preocupaciones de la entidad, como:

• la ausencia generalizada en nuestra sociedad de percepción del riesgo respecto del impacto del abuso de determinadas sustancias y, sobre todo, respecto a algunas tan prevalentes como el alcohol y el cannabis;
• el aumento preocupante del consumo de cannabinoides sintéticos en jóvenes;
• los menores refieren que acceden sin problemas a los juegos on line y casas de apuestas. La publicidad de todo ello sigue sin control, es urgente una regulación restrictiva que limite su acceso y difusión;
• la coexistencia del diagnóstico dual (drogodependencia y psicopatología psiquiátrica) en muchas de las personas atendidas, y que determina una peor evolución y pronóstico. El consumo de drogas en las últimas décadas ha causado verdaderos estragos en materia de salud mental.
• La necesidad de articular una mejor coordinación entre los sistemas sanitarios, de salud mental y de inclusión social.

En este sentido, el presidente de la Fundación Arzobispo Miguel Roca-Proyecto Hombre, Ignacio Grande Ballesteros, pide “un liderazgo político para para incrementar la prevención y la atención a estas nuevas necesidades”. Y reitera “una llamada a la sociedad para sensibilizar ante los riesgos de las adicciones y un compromiso solidario a través del voluntariado”.

Para acceder a la Memoria 2018, pincha aquí http://www.proyectohombrevalencia.org/memorias.html